Transporte confirmó que dejarán de subsidiar a los colectivos de CABA

Lo aseguró el secretario del área, Franco Mogetta,. Será a partir de septiembre.

El secretario de Transporte de la Nación, Franco Mogetta, informó este martes que el Gobierno le quitará desde septiembre los subsidios a las líneas de colectivo que operan en la Ciudad de Buenos Aires. La información se conoce en medio de una fuerte tensión con la gestión porteña por el incumplimiento por parte del Poder Ejecutivo Nacional del pago de la porción de coparticipación que le recortó el expresidente Alberto Fernández.
“A partir del mes de septiembre la Ciudad Autónoma de Buenos Aires va a solventar el 100% de las compensaciones de sus 31 líneas de colectivos y el Estado Nacional no va a poner un peso. Una deuda pendiente que tenía el Estado y que ahora vamos a subsanar con el apoyo del ministro de Economía, Luis Caputo”, señaló Mogetta, quien remarcó: “Buscamos dotar de equidad a estos sistemas”.
En paralelo, la Ciudad se presentará ante la Corte Suprema para advertir que el Gobierno Nacional no está pagando en forma automática el porcentaje de la coparticipación federal que fue quitado durante la administración anterior.
La pelea por los fondos profundiza los contrapuntos entre la administración libertaria y el expresidente Mauricio Macri, quien a pesar de que su partido funcionó como un aliado del oficialismo en el Congreso, en los últimos días le marcó la cancha al Presidente y criticó la calidad de su gestión. Fue después de mantener un encuentro de cuatro horas con Javier Milei en Olivos, donde pidió por el retorno de los fondos de coparticipación a la Ciudad, histórico bastión Pro desde 2007.
El funcionario nacional expuso en la Comisión de Transporte de la Cámara de Diputados, presidida por la legisladora mendocina de la UCR, Pamela Verasay. Mogetta brindó detalles sobre la gestión en su cartera en medio de los cruces por la quita del Fondo Compensador del transporte que afecta a las provincias.
A principios de año, la administración de Milei eliminó el principal fondo a través del que se subsidiaba el transporte del interior y los precios del servicio se dispararon. Esto generó el rechazo generalizado de dirigentes municipales de distintos puntos del país, que unieron fuerzas en la Liga de intendentes del interior, entre los que se destaca a Daniel Passerini, de la ciudad de Córdoba, y a Pablo Javkin, de Rosario, Santa Fe.