Revés para el gobierno: rechazaron los vetos de universidades y del Garrahan

La Cámara Baja la Cámara tuvo una amplia mayoría. Buenas chances en el Senado para confirmarlos

La Cámara de Diputados rechazó este miércoles los vetos del presidente Javier Milei a dos leyes clave: la de emergencia pediátrica, que asegura recursos adicionales al Hospital Garrahan y a otros centros de salud infantil, y la de financiamiento universitario, que actualiza las partidas de funcionamiento de las casas de estudio y contempla la reapertura de paritarias docentes.

La votación marcó un duro revés para el oficialismo. En el caso de la emergencia pediátrica, 181 diputados votaron por insistir con la norma, contra 60 que acompañaron el veto y una abstención.

En el financiamiento universitario, los resultados fueron 174 votos afirmativos, 67 negativos y dos abstenciones. En ambos casos se superó la mayoría especial de dos tercios requerida.

Con 132 presentes, la oposición logró poner en marcha la sesión para revertir los vetos de Milei. Tal cual se esperaba, el PRO y LLA, no dieron quorum. Apenas se puso en marcha la sesión, convocada por la oposición, el presidente de Encuentro Federal, Miguel Ángel Pichetto pidió la palabra para acelerar la votación para insistir con las dos leyes vetadas por el presidente Javier Milei.La jugada, que había sido prevista de antemano por los impulsores de la sesión, fue clara: aprovechar que ya contaban con los votos suficientes para voltear los dos vetos de Milei. El jefe de la UCR, Rodrigo de Loredo, rechazó la propuesta del rionegrino. “La anulación de la palabra no la vamos a respetar”, dijo el radical.
Los proyectos habían sido aprobados en agosto por amplias mayorías y luego vetados por Milei bajo el argumento de que generaban un impacto fiscal excesivo e incompatible con la política de equilibrio de las cuentas públicas. La oposición, en cambio, defendió su necesidad frente a la crisis del sistema sanitario y universitario.

Los dos diputados del MID, Oscar Zago y Eduardo Falcone, los cuatro del bloque de Marcela Pagano, los cuatro misioneros y los diputados macristas de Santa Fe se sumaron para rechazar junto a la oposición los vetos de Javier Milei al Garrahan y las universidades.

Al momento de la votación, además, Silvia Lospennato se despegó de los amarillos, y acompañó ambas leyes. Lo propio hicieron Baldassi, Brabilla y Álvarez.

En tanto, la exgobernadora María Eugenia Vidal acompañó la ley del Garrahan y se abstuvo en la de Universidades. Otros diputados amarillos que también votaron en favor del Garrahan fueron Gabriela Bessana y Emmanuel Bianchetti, así como también Núñez. En tanto, en favor de la ley universitaria, también sumó a la rosarina Figueroa Casas.

El Gobierno intentó en los días previos asegurar apoyos a través de negociaciones con gobernadores y mediante la distribución de Aportes del Tesoro Nacional. Provincias como Misiones, Santa Fe, Chaco y Entre Ríos recibieron transferencias millonarias, aunque esas gestiones no alcanzaron para sostener los vetos en la Cámara Baja.

Durante la sesión, legisladores opositores remarcaron la situación crítica del Hospital Garrahan y de las universidades nacionales. “Son recursos esenciales para garantizar derechos básicos”, sostuvo varios diputados opositores al fundamentar su voto. Desde el oficialismo, en cambio, se argumentó que las iniciativas aprobadas implican gastos que no cuentan con financiamiento genuino.

El grueso de los bloques dijeron presente en la sesión, salvo La Libertad Avanza y el PRO, que esperaron a que se pusiera en marcha la sesión para sentarse en sus bancas. La excepción, una vez más, fue el larretista Álvaro González. La sesión fue inaugurada por la vicepresidenta primera de la Cámara, Cecilia Moreau (UP). Es que empezó antes de lo esperado (apenas habían pasado 8 minutos de la hora de la convocatoria) y Martín Menem no se encontraba en el estrado.

El líder de la bancada de UP, Germán Martínez, había dado un discurso encendido, convocando a otros espacios políticos a reconstruir la esperanza. “La patria nos está cagando a gritos para que tengamos otra actitud, una actitud que nos permita poner a la Argentina de pie”, dijo sobre la votación que estaban a punto de realizar, y argumentó que a los actores de la movilización que reclamaban las dos leyes “no los unía la bronca ni el rencor sino el deseo de hacer una Argentina grande”.

La votación reflejó también movimientos dentro del arco parlamentario. Algunos diputados que habían acompañado al oficialismo en otras instancias se pronunciaron esta vez en contra del veto, lo que amplió la diferencia a favor de la oposición.

Tras la sesión, gremios docentes y asociaciones de profesionales de la salud celebraron el resultado. Afuera del Congreso, estudiantes y trabajadores habían realizado una concentración en apoyo a las leyes, lo que agregó visibilidad al debate legislativo.

El trámite ahora continúa en el Senado. Si la Cámara alta también insiste con las normas, los vetos presidenciales quedarán definitivamente sin efecto y ambas leyes entrarán en vigencia, estableciendo nuevas obligaciones de financiamiento para el Estado nacional en materia de salud y educación.